¿Qué es la Biosfera?
La biosfera, también conocido bajo el nombre de biósfera, es, según la ecología, un sistema que está conformado por el gran conjunto de todos los seres vivos que habitan el planeta Tierra.
Normalmente suele hablarse de biosfera cuando hacemos referencias a toda la vida presente en nuestro mundo, pero en algunas ocasiones el término se emplea para hacer referencia a un espacio en el cual la vida se desarrolla.
Se puede decir que la biosfera es una especie de ecosistema global, a lo cual también podemos referirnos si utilizamos otros términos tales como biogeosfera o incluso ecosfera.
La biosfera es una colectividad de varios tipos de organismos y especies de seres vivos que interactúan todos entre sí en forma directa o indirecta, conformado así la diversidad que compone al ecosistema global.
En cierta forma, se puede hablar de la biosfera como si fuera un gran ser vivo que a su vez posee ciertas capacidades, limitadas por supuesto, para controlar no solamente su estado actual, sino también su posible evolución.
El origen del término biosfera data del año 1875, cuando fue usado por Eduard Suess, pero su significado ecológico surge en la década de 1920 gracias a Vladimir I. Posteriormente, en el año 1935 Vernadsky llega a un término similar a partir del término ecosistema.
En diversas ciencias la biosfera es un tema de gran importancia, incluyendo la astronomía, la climatomología y la geología por ejemplo, y en general guarda relación con todas las ciencias que de alguna forma tratan e investigan la vida en la Tierra o la posible existencia de vida en otros planetas.
Características de la Biosfera
En el planeta Tierra, la vida está distribuida principalmente en dos sectores: los océanos y los continentes.
La mayor cantidad de vida de los océanos se localiza en zonas donde llega la luz, y es allí donde comienza la cadena alimenticia. Aquí se encuentran además algunos tipos de fotosintetizadores, principalmente en forma de bacterias y organismos como el plancton.
Las mayores concentraciones se pueden encontrar en las zonas frías y en las cálidas, no en las templadas como se suele creer. Las regiones de alta mar o mar abierto tienen una densidad de vida mucho menor en comparación a las regiones más cercanas a las costas.
La densidad media de vida es bastante mayor sobre los continentes que en los océanos, aunque la producción primaria total del planeta es conformada en un 50% en los océanos debido a que la extensión acuosa es mucho mayor a la terrestre.
En los continentes la cadena alimenticia comienza con las plantas terrestres, las cuales también se encargan de realizar la fotosíntesis. Las plantas obtienen sus nutriente minerales a través del suelo gracias a sus raíces. El agua circula hasta el follaje de la planta, donde se evapora tras transportar los nutrientes.
El agua resulta un factor muy importante para la vida en los continentes, pero también lo es la temperatura.
Las zonas con mayor densidad de vida suelen ser aquellas con más plantas, mayor disponibilidad de agua potable líquida y una temperatura media-alta, como por ejemplo los bosques y las selvas, mientras que las que tienen menos densidad de vida son algunas áridas como los desiertos, o las extremadamente frías como los polos.
La vida en la biosfera está interrelacionada, es decir, si se daña a un organismo o a una parte de vida que compone la biosfera, en consecuencia se está dañando a los demás componentes y seres vivos de la misma, ya que las especies forman un conjunto único, en donde todos los organismos vivos dependen unos de los otros para su desarrollo y preservación, incluso hasta de factores no vivos como factores climáticos o geográficos.
Capas de la Biosfera
La biosfera representa en la Tierra el espacio en donde se encuentra vida.
Las capas del planeta que la conforman son la litosfera, que es la superficie sólida del planeta, la atmósfera, que se extiende por encima de la capa terrestre y representa el espacio aéreo, y finalmente la hidrosfera, que es la capa, que es la capa de agua en todos sus estados sobre nuestro planeta.
La vida existe, a grandes rasgos, tanto en el suelo como en el aire y el agua, por ello todas estas capas conforman la biosfera.
La extensión de la biosfera es de aproximadamente 20 kilómetros de espesor, aunque la mayor cantidad de vida se encuentra entre los 6 kilómetros sobre el nivel del mar y 1 km debajo de él.
- Litosfera: la litosfera es la capa superior del manto terrestre del planeta, es decir, los continentes. Proporciona medios de sustento y hábitat para las especies terrestres, desde pequeños microorganismos y bacterias hasta los grandes mamíferos terrestres y toda variedad de ser vivo, tanto animal como vegetal.
- Atmósfera: la atmósfera no solo proporciona un espacio o medio de movimiento para los animales aéreos y otras formas de vida, que se pueden encontrar hasta 2000 metros sobre la superficie terrestre, sino que también forma parte en otros factores clave para el desarrollo de la vida. Las regiones baja de la atmósfera contienen gases como el oxigeno y el dióxido de carbono, que son esenciales para la respiración de los seres vivos y su desarrollo, así como también para el sistema de la fotosíntesis. Esta capa también protege al planeta Tierra desviando gran parte de la radiación solar que llega desde el espacio, y a su vez determina ciertos factores climáticos diferenciales sobre la Tierra.
- Hidrosfera: la hidrosfera conforma la parte acuática del planeta, es decir, todo aquello que sean mares, océanos, ríos, lagos, entre otros. En ella, habitan un sinnúmero de especies, tanto animales como vegetales. Las especies de fauna y flora difieren según los distintos medios de hábitat, como aguas termales, agua dulce, agua salada, especies de ríos o aguas estancadas.
Tipos de Biosfera
La biosfera, tanto su parte oceánica como terrestre, es el nivel biológico máximo.
Éste a su vez, se compone de distintos biomas, estos biomas, en los cuales se forman los ecosistemas funcionales para el desarrollo de los seres vivos, albergan distintas especies de formas de vida animal y vegetal, que interactúan con el medio que integran para su desarrollo.
Pueden ser divididos en cinco principales: Acuáticos, Bosque, Pradera, Tundra y Desierto.
Biomas Acuáticos
Los biomas acuáticos conforman aquellos en los que la presencia de agua sea elevada y crucial para la vida. Pueden ser medios de agua salada, principalmente océanos y mares, y también se refiere a medios de agua dulce, como lagos y lagunas, estanques, ríos y arroyos, entre otros. En conjunto, concentran una gran parte de la biodiversidad del planeta.
En el ecosistema marino, formado por los océanos y mares, se encuentran variedades de especies las cuales se desarrollan en distintos medios. Éstos se pueden clasificar de 2 maneras:
- Fóticos: los medios fóticos cuentan con la presencia de luz solar, vital para el desarrollo de muchas de las especies de este sistema.
- Afóticos: las especies que se encuentran en medios afóticos, están adaptadas para la vida en aguas profundas, donde no llega la luz solar.
Bioma Bosque o Forestal
El bioma bosque o forestal es uno de los más amplios y con mayo variedad de especies tanto de flora como de fauna. Una de las principales características de este bioma es la vegetación principalmente de árboles de gran tamaño.
Puede subdividirse según factores climáticos y tipos de árboles presentes.Estas subdivisiones son: bioma de selva tropical, templado, chaparral, alpino y taiga. Según la zona geográfica y el clima, el tipo de vegetación y fauna presente varía de un bioma forestal a otro.
Bioma Pradera
Las praderas se encuentran en un punto medio entre el bioma bosque y el bioma desierto, ya que reciben suficientes precipitaciones para mantener una abundante vegetación de baja estatura como hierbas, pequeños arbustos y ciertos árboles, aunque no son capaces de formar una vegetación boscosa.
El suelo en estas zonas es rico en minerales y vegetación, lo que hace perfecto para el hábitat de ganado y animales de granja. También, son zonas muy eficientes para plantaciones de vegetales y granos como el trigo y el maíz. Posee una temperatura mayormente templada, con una época de lluvias abundantes y otra de sequías.
Bioma Tundra
La tundra es un bioma de bajas temperaturas y que cuenta con poca diversidad en flora y fauna debido a esto. El suelo no suele ser fértil para la vegetación como en otros biomas, por lo que está conformado mayormente por algunas especies vegetales que viven bajo condiciones frías extremas y musgo. Las lluvias son escasas.
La fauna presente también es bastante reducida y son principalmente especies que resisten bajas temperaturas. La mayoría de estas especies son carnívoras u ovíparas, ya que el alimento vegetal escasea.
Bioma Desierto
El bioma de desierto tiene la particularidad de que no posee mucha vegetación.
Se pueden clasificar a desiertos como los áridos y muy calurosos durante todo el año y con , como el desierto del Sahara en África, aunque también se clasifican como desiertos fríos durante todo el año como el desierto de Gobi en Asia, mientras en otros incluso cuentan con presencia de hielo y nieve, como los de la Antártida.
Las precipitaciones son escasas a lo largo de todo el año, y el paisaje presenta una ausencia general de agua. En algunos desiertos, como el desierto de Atacama, las lluvias son prácticamente inexistentes.
La vegetación se encuentra de forma muy espaciada y los mecanismos de defensas de las plantas suelen hacer que la vegetación no se encuentren en zonas cercanas entre sí. La flora presente se ha adaptado para la vida en escasez de agua, por ello algunas especies solo crecen cuando hay precipitaciones, o bien son capaces de acumular agua en sus partes internas.
Otras, poseen raíces extensas que llegan hasta las zonas terrestres con acceso al suelo húmedo, muy por debajo de la superficie.
Los animales que habitan en los desiertos, también se han desarrollado para sobrevivir en un medio tan seco. La obtención de agua suele ser primariamente de sus alimentos.
Muchos de ellos suelen esconderse durante el día en cuevas o en madrigueras, mientras que durante las noches, cuando la temperatura del desierto baja considerablemente, los animales salen a cazar y a buscar alimento.
Niveles de organización en la Biosfera
La biosfera, representa el máximo nivel de vida en forma general. Es decir, que biosfera es cualquier sistema donde factores bióticos (que tengan vida, como los animales y plantas) como abióticos (sin vida, como las rocas), formen un conjunto dependiente entre si para su beneficio, sustentabilidad y desarrollo.
Se divide en niveles de organización desde el todo hasta el individuo: Bioma, Ecosistema, Comunidad, Población e Individuo.
- Bioma: son áreas que contienen fauna y flora adaptada al entorno en el que se encuentra. A su vez, un bioma se diferencia de otro no sólo por estos factores, sino también por factores climáticos propios del ecosistema, como la temperatura, precipitaciones, ambiente, geología, presencia de sol y estaciones, entre otros. Un bioma puede contener y estar formado por varios ecosistemas.
- Ecosistema: es un conjunto formado por todos los seres vivos, tanto animales como plantas, en un determinado lugar. Estos seres, interactúan entre sí, y también con elementos no vivos como el clima. Dependen de esto para su desarrollo y establecimiento en dicho ecosistema, pudiendo establecer o no una comunidad.
- Comunidad: una comunidad es un grupo o una asociación de varios que ocupan el mismo lugar geográfico, en un mismo momento. Algunos realizan interacciones entre si y se ayudan para el desarrollo de ambos dentro de un mismo espacio, mientras otros grupos son rivales y luchan por el mismo territorio. Cada grupo de individuos de la misma especie, forma poblaciones, que a su vez forman comunidades.
- Población: son organismos de la misma especie agrupados en un mismo lugar geográfico y que se unen para facilitar el desarrollo de la especie ayudándose entre si. Las poblaciones son compuestas por varios individuos.
- Individuo: es una forma de vida individual, es decir, es 1 sólo organismo, o la expresión mínima.
Biosfera Profunda
Hasta hace relativamente poco tiempo, se establecía como límite de biosfera terrestre una capa a pocos metros de profundidad, donde se establecen y se encuentran las raíces de las plantas y árboles, ya que se creía que allí era donde se concentraba la mayor cantidad de vida significativa subterránea.
Sin embargo, las últimas investigaciones y avances geológicos y biológicos, demuestran que no solo se encuentran organismos quimioautótrofos en los fondos oceánicos, sino que existen ecosistemas dependientes de estos organismos en capas inferiores de la corteza terrestre.
La mayor parte de estos organismos consisten en bacterias y microorganismos clasificados como «arqueas extremófilas», es decir, que subsisten bajo condiciones extremas, obteniendo energía a través de procesos químicos inorgánicos, «quimiosíntesis».
Estos organismos prosperan mejor en un entorno con minerales y mezclas químicas inestables, y como la Tierra es un planeta que aún continúa desarrollando procesos internos, se dan las condiciones para el desarrollo de este tipo de vida en capas terrestres inferiores, creando así la clasificación individual de biosfera denominada «Biosfera Terrestre Profunda».
¿Por qué es importante este descubrimiento?
El descubrimiento de esta clase de biosfera trajo un cambio importante para la ciencia y el estudio de la astrología, tanto de forma teórica como psicológica, ya que demostrar la viabilidad de presencia y desarrollo de vida bajo condiciones extremas con obtención de energía mediante procesos químicos, en ausencia de luz, ha significado un gran cambio en el estudio de la posibilidad de vida en otros planetas.
De esta forma, es posible la probabilidad de aparición de formas de vida espontánea en otros planetas que conformen progresivamente biosferas, ampliando los estudios sobre parámetros de habitabilidad planetaria (capacidad de un cuerpo espacial para albergar o desarrollar vida, sea planeta o satélite), haciendo posible el razonamiento de desarrollo de formas de vida en lugares donde anteriormente parecía improbable.