Energía eólica

¿Qué es la energía eólica?

Energía eólica no es otra cosa que obtener energía a través del viento.Es la energía cinética que se genera por medio de las corrientes de aire y luego es manipulada por el ser humano. La energía eólica es fundamental para lograr una conciencia respecto a la ecología.

La palabra eólico deriva de la palabra Aeolicus que a su vez pertenece o es relativa a Eolo, el dios del viento de la mitología griega. La energía producida por el viento ha sido utilizada durante siglos para ayudar con la navegación o bien para mover las aspas de un molino, por lo tanto la podemos considerar como una  de las energías más antiguas usadas por el hombre.

Características de la energía eólica

Actualmente, mediante el uso de aerogeneradores, la energía eólica es transformada en energía eléctrica. En el año 2009, gracias al viento se pudo un generar aproximadamente un 2% de la energía total que se consumió en el mundo en dicho año. Cada día más países apuestan por las energías alternativas como la eólica, la cual provee de grandes fuentes de poder para alimentar las necesidades de los ciudadanos, industria y gobiernos. Ya no es raro ver noticias sobre las multinacionales y sus nuevos campos de generación de energía eólica, y por suerte, el panorama parece prometedor para que siga creciendo.

Sin dudas la energía eólica es una de las mejores energías que existen: es abundante, renovable, limpio y también nos ayuda a disminuir la cantidad de gases que causan el efecto invernadero, aunque como todo no es color de rosa, hay un inconveniente, y es la intermitencia.

Si miramos la historia de la energía eólica, debemos retroceder muchos siglos en el tiempo, ya que el ser humano la ha estado utilizando desde hace mucho. Desde la antigüedad el viento ha sido utilizado como una fuerza motriz, llegando a impulsar embarcaciones a través de los océanos y haciendo que distintas máquinas funcionen por medio de los molinos. Los primeros molinos datan de hace 2000 años aproximadamente, aunque en el siglo VII su uso se extendió mucha a través de Persia, lo que sería la actual Irán. En aquella época los molinos solían ser utilizados para moler el trigo y también para la extracción de agua.
Los molinos llegaron a Europa sobre el siglo XII aproximadamente, y surgieron en Francia e Inglaterra, comenzando su gran expansión por todo el continente en cuestión de pocos años. Actualmente en algunos países todavía existen molinos de hace muchos siglos: en Holanda por ejemplo, un país conocido por sus abundantes vientos, aún quedan molinos del siglo XVI muy bien conservados.
Actualmente los molinos no se usan, ya que existen mejores técnicas para procesar el trigo. Aún así, lo que sí utilizamos son las conocidas turbinas eólicas, que nos sirven para poder generar energía eléctrica limpia y a favor de la ecología. Existen turbinas de toda clase, algunas más efectivas que otras por supuesto, y algunas incluso se encuentran en el mar.

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